¿Quién nos educa en la moral?
La educación moral es un proceso de aprendizaje que permite a los estudiantes y adultos en una comunidad escolar comprender, practicar e interesarse por los valores éticos fundamentales tales como el respeto, la justicia, la virtud cívica y la ciudadanía, y la responsabilidad por sí mismo y por el prójimo.
¿Qué significa moral y emocional?
Una emoción moral es aquella emoción que tiene como fuente principal de interés el respeto humano y una preocu- pación por la calidez de las relaciones humanas, a su vez, este movimiento no está reñido con el propio florecimiento y au- to-concepción, sino que, más bien, los fomenta.
¿Qué son las emociones Según Nussbaum?
Para Nussbaum las principales emociones políticas son la compasión, el amor y el patriotismo, aunque su teoría deja espacio para considerar otros sentimientos morales. Por compasión se entiende una emoción dolorosa orientada hacia el sufrimiento grave de otras personas.
¿Cuál es el opuesto de lo moral?
El opuesto de lo moral es propiamente lo no moral, términos que indican que el acto no tiene significado moral en absoluto, que simplemente no se refiere a la moral. La palabra amoral se utiliza también en este sentido, pero se aplica con mayor frecuencia a personas faltas de un sentido de responsabilidad moral.
¿Cuál es la diferencia entre moralidad y ética?
La palabra ética es una expresión más técnica dentro de la Filosofía y da lugar a un sistema de principios filosóficos que son la base de un código prescriptivo. La moralidad es la calidad de los actos humanos en cuya virtud los designamos como buenos o malos, como acertados o erróneos.
¿Cómo se mide la moralidad?
La moralidad se mide también cuando la persona está sola, no siendo observada por nadie, por ejemplo, en situaciones donde se requiere tener mucha integridad. Una concepción de la moralidad puede tender hacia cualquiera de las posibles direcciones en un campo determinado.
¿Cómo se usan las palabras ética y moral?
En nuestro vocabulario, encontrarás que la mayoría de las personas usan las palabras ética y moral de manera intercambiable, como si fueran sinónimos. Pero, históricamente, ese no ha sido el caso. La palabra en español “ética” viene de la palabra griega ethos.