Tabla de contenido
¿Cuáles son los 3 tipos de Quiebras?
Las quiebras pueden ser de tres tipos:
- Fortuita, es decir, cuando el comerciante sufrió una disminución de sus bienes de forma inevitable y que llegó al extremo de cesar sus pagos.
- Culpable, es decir, el comerciante realiza actos negligentes que provocan, facilitan o agravan el estado de casación de pagos.
¿Cuáles son las principales causas de las Quiebras?
Estos son los motivos más frecuentes que pueden llevar a una empresa a la bancarrota.
- Razones que harán que tu empresa vaya a bancarrota.
- No contar con fondos suficientes.
- Rigidez en la estrategia.
- No conocer a los clientes.
- Competir en precio.
- Mala gestión del dinero.
- Falta de liderazgo.
- Depender de ciertos empleados.
¿Quién declara en quiebra una empresa?
El comerciante en concurso mercantil será declarado en estado de quiebra cuando: El propio comerciante así lo solicite o sus acreedores lo demanden. Transcurra el término para la conciliación y su prórroga, si se hubiere concedido. El conciliador solicite la declaración de quiebra y el juez la conceda.
¿Qué es la situación de quiebra?
Está tipificada legalmente: Dado que la situación de quiebra es una situación que podría utilizarse para fines fraudulentos, está recogida en la ley. De esta forma, se pretende que la situación de quiebra sea una situación objetiva, no subjetiva.
¿Cuáles son las soluciones a la quiebra?
De manera general, podemos establecer dos posibles soluciones a la quiebra: Conseguir un aumento de capital de modo que los activos igualen o superen a los pasivos. Que los acreedores perdonen las deudas. Es decir, una quita de la deuda.
¿Cuáles son los tipos de quiebra?
La importancia de que la quiebra esté recogida en el código legal o de comercio de cada país es fundamental. Gracias a eso, podemos distinguir tres tipos de quiebra: Quiebra fortuita: Ocurre cuando se ha hecho todo lo posible por evitar esta situación.
¿Qué es la quiebra fraudulenta?
Quiebra fraudulenta: Es un caso aún más grave. El administrador de la organización, a sabiendas de que está realizando actividades que van en contra de la estabilidad y sostenibilidad de la organización los realiza con una mala intención. Esta mala intención se conoce más técnicamente en derecho como una actitud dolosa.