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¿Qué son los samuráis en Japón?
Los primeros samuráis aparecieron en el siglo 9 y eran originalmente personas que protegían a los miembros dealto rango de la corte imperial. El nombre “samurái” proviene del verbo saburau que significa “servir a alguien”. Bajo este sistema, los samuráis eran la clase alta, y gobernaban Japón.
¿Cuál es la influencia de Japón en la Edad Media?
Esa influencia de China en Japón se debió, en buena media, a la cercanía geográfica que existe entre ambos países. Los japoneses también retomaron de la civilización China su escritura, la religión budista, filosofías como el confucianismo y, sobre todo, la forma de gobierno imperial.
¿Qué función cumplian los samuráis?
Inicialmente, el papel del samurai era para recaudar impuestos y servir al Imperio. Desde el siglo X, la figura del samurái toma forma y las ganancias de una serie de funciones militares, alcanzando su apogeo en el siglo XVII. Estilos marciales creadas por los Samurai. hoy se llaman Kobudo (古武道).
¿Qué pasó con los samuráis en japonés?
Fue así como a mediados del siglo XII los samuráis alcanzaron su madurez e irrumpieron con fuerza en la escena política japonesa. En 1156, la muerte del emperador Toba desencadenó una guerra entre facciones de la nobleza, la llamada guerra Hogen.
Comoquiera que sea, en el siglo X los samuráis formaban ya una clase social muy bien definida, que se caracterizaba por la propiedad de la tierra y por la actividad guerrera. Su condición se transmitía incluso hereditariamente.
¿Cuáles fueron las características de los samuráis en el siglo XVI?
En el siglo XVI el país se pacificó, y los samuráis ocuparon menos tiempo en la batalla, y se dedicaron a cultivar su propia tierra o, en otros casos, a administrar las tierras de sus señores feudales. Las familias de los samuráis representaban un 6\% de la población y se casaban entre sí para mantener la valorada estirpe.
¿Cuáles fueron las obligaciones de un samurái?
Cada samurái estaba obligado a acudir a la llamada de su señor y a presentarse armado, equipado y con tropas correspondientes a la riqueza de su feudo. Esto, obviamente, hacía que un samurái pudiera aportar más que otro por lo que al final, no todos gozaban de la misma consideración ante su señor.