¿Cómo se divide el poder en el sistema federalista?
El Supremo Poder de la Federación se divide, para su ejercicio, en los Poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial. El Poder Ejecutivo gobierna de conformidad con lo establecido por la legislación.
¿Qué es el poder público federal?
Poder Ejecutivo federal La doctrina lo define como «el conjunto de órganos estatales en que éste se deposita o a los que se confía la administración pública y se encabeza por un funcionario denominado Presidente».
¿Quién hace las leyes federales?
El Congreso promulga la ley federal. El Poder Ejecutivo administra y hace cumplir la ley.
¿En qué se diferencian el Tribunal Constitucional y el Supremo?
A continuación vamos a explicar brevemente en qué se diferencian el Tribunal Constitucional y el Supremo, por lo que le invitamos a que siga leyendo. El Tribunal Constitucional es el garante de la Constitución Española y por lo tanto se acude a él cuando se tienen dudas sobre la constitucionalidad de alguna ley.
¿Qué es el Tribunal Supremo y cuáles son sus funciones?
El Tribunal Supremo, en cambio, sí que forma parte del Poder Judicial y se encuentra en su cúspide: es el último que tiene poder para decidir si una sentencia es válida o no. Los ciudadanos pueden acudir a él, con el requisito previo de que hayan agotado los Tribunales inferiores. Las decisiones que toma se denominan jurisprudencia.
¿Cómo acudir a un tribunal de Constitucionalidad?
El Tribunal Constitucional es el garante de la Constitución Española y por lo tanto se acude a él cuando se tienen dudas sobre la constitucionalidad de alguna ley. Los ciudadanos que vean vulnerados sus derechos fundamentales también pueden acudir a él mediante un recurso que se llama de amparo.
¿Cuáles son las preocupaciones de los antifederalistas sobre el Poder Judicial Federal?
En particular, aborda las preocupaciones de los antifederalistas sobre el alcance y el poder del poder judicial federal, que habría estado compuesto por jueces no electos vitilicios. Los Federalist Papers, como texto de base de interpretación constitucional, son frecuentemente citados por juristas estadounidenses, pero no son leyes.