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¿Quién gobierna en una monarquía absoluta y cuál es su característica?
La monarquía absoluta es una forma de gobierno. En esta, el rey es la máxima autoridad gubernamental, y además, este ostenta los tres poderes del Estado (legislativo, ejecutivo y judicial). En ella, el poder lo ejerce el rey, concentrando en él todos los poderes del Estado y sin ningún tipo de límite formal.
¿Cuáles son las características principales del absolutismo monarquico?
A grandes rasgos, el absolutismo presentó las siguientes características: No existía propiamente un Estado, o en todo caso el Estado se reducía a la figura del rey. No había poderes públicos, ni Estado de derecho. La voluntad del monarca era ley, y en tanto ley, era incuestionable.
¿Quién fue el único gobernante de la monarquía absoluta?
En una asamblea de 1680 les preguntó a los estados si seguía en el consejo, a los que estos le respondieron que él «no dependía de nadie sino de sí mismo», lo que dio lugar a la monarquía absoluta. El Riksdag lo ploclamó como el único gobernante del país.
¿Cuáles son los ejemplos de monarquía absoluta?
Ejemplos de monarquía absoluta España. La monarquía española tuvo su origen en la unión entre Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón, mejor conocidos como los Reyes Católicos. La Monarquía española perdió su condición monarquía absoluta, y pasó a ser una monarquía parlamentaria cuando España se transforma en un estado liberal.
¿Cuál es la diferencia entre la monarquía absoluta y la nobleza?
En el caso de la monarquía absoluta, la corona se unifica bajo un Estado creando una administración funcionarial; y la nobleza se somete al rey. En la monarquía absoluta el rey está sujeto a sus propias leyes por ser monarca por derecho divino.
¿Cuál es la diferencia entre el papa y la monarquía absoluta?
Como gran diferencia de otras monarquías absolutas, el cargo no se hereda, sino que es elegido por el Colegio Cardenalicio , un órgano formado por todos los cardenales de la Iglesia Católica del mundo. El Papa lo es hasta que muere o hasta que abandona su puesto, algo que sólo ha sucedido siete veces en toda la Historia.